jueves, 16 de febrero de 2012

El eterno recluso

Hace muchísimo que no escribo aquí. Desde mi última entrada han pasado tantas cosas ^^ al final conseguí coger a las gatitas del Dr. Who de las que hablaba la última vez. Logramos acogerlas a ellas y a su mami, a finales de agosto empezó la caza y, a día de hoy, ya están esterilizadas y bastante socializadas ^^ pero este no es el tema que ocupa esta nueva entrada... hoy tengo un tema que quiero exponer porque creo que todos tenemos derecho a nuestro minuto de gloria, ese instante en que nos conozca mucha gente sin nosotros conocerlos a ellos y hablen de nosotros (si puede ser bien) aunque sean unos pocos segundos.

Quiero darle este minuto de gloria a un pobre marginado de la casa, una entidad cuya misión en la vida se ve frustrada cada día por la indiferencia de aquella a la que sirve, un modesto compañero que intenta ser útil, fracasando una y otra vez: el móvil de mi madre




Sí, en esta foto lo veis donde siempre está, en el armario de los platos, encerrado entre la ensaladera roja (que parece el casco de Darth Vader en rojo) y los platos de diario.

Sólo. Normalmente a oscuras. Me pregunto si de vez en cuando no encenderá sus propias luces en esa reclusión carcelaria para darse algo de esperanza.

Es un móvil modesto, nunca ha pretendido ser importante, pero es un tío duro porque hasta la fecha ha aguantado de todo y ahí sigue!! al pie del cañón!! Funcionando como un jabato-móvil!!
Sin embargo, por muy duro, resistente y perseverante que sea, la mujer que lo posee lo ha dejado de lado, lo tiene ahí, castigado, ignorado y recluido. A veces, cuando ella no está y la llamo (qué ilusa!! llamarla cuando no está!! todavía tengo tanto que aprender), oigo el triste lamento de este bichito en el armario, diciendo: "estoy aquí... ni lo intentes, no sirvo para nada" suena el tono hasta más apagado de lo que debería, me da tanta pena.

Hace un tiempo mi madre me dijo que quería un iphone... y yo, la verdad, pienso: pero cómo le voy a regalar un iphone, qué pasaría con él? El iphone es mucho más que un móvil, tiene muchas aspiraciones, es el ejecutivo agresivo de los móviles, lo hace prácticamente todo y siempre quiere saber más. Cuando un iphone entra en una casa lo hace para ser grande y comerse el mundo, para que el resto de los miembros de la casa quieran uno como él. Conste que no estoy en contra de todo esto. Pero... si todo lo que hacemos sigue una pauta y solemos repetirla... cómo llevaría el iphone el encarcelamiento. Porque el actual lo lleva con dignidad y resignación, está cargado de humildad y buenos propósitos; pero un iphone, con toda esa ambición, con tantas cosas que contar y enseñar, al tercer día nos tocaría llevarlo a un psiquiatra por depresión debida a una frustración laboral.

Desvaríos aparte, os cuento esto para ver si logramos que el pequeñín vegas sea un poco importante, tenga un lugar en el mundo y, gracias al minutito de gloria, cuando mi madre lo mire se acuerde de que tuvo hasta su entrada en un blog y lo meta en el bolso como si llevara en él a un tío importante.


El móvil y yo os agradeceremos todo el apoyo que le déis.

Besitos ^^

5 comentarios:

  1. XD XD XD XD me ha dado pena el pobre movil!Hasta ganas de adoptarlo y darle una buena vida util XD XD

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  2. xDD él agradece tu solidaridad xDD

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  3. Respuestas
    1. xD peor porque al menos WALL.E tenía una misión, más o menos repetitiva pero podía hacer algo, este sólo espera y espera xD

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    2. Que pena me a dado el pobre movil,suerte que a tenido su momento de gloria:)en el blog.

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